Tengo sueño
pero del sueño, se me quedó sólo la letra s
porque la realidad se me comió lo que pretendía.
De lo que quería, hace en mi corazón
ya un milenio y
se esfumó con ella
en aquel doloroso ascensor lleno de bolsas
de mi casa
con sus cosas.
Lo miraba y no me lo creía.
subió y las cogió.
Se iba.
Con sus ojos de adiós secos me miraba
Me decía dónde se dirigía,
y mis ojos muertos se quedaban
en aquel día lleno de frío,
por tener una super luna, no me olvidaré,
blanca, bella, esquiva, inmensa, gigantesca, y