Las 11 y 11, números brutales
Las palmeras me miran desde los grandes ventanales
Sierra de picos grandes, ventanas de colores azules abisales.
Dos días para irme, el día de los lagrimales.
El señor del antifaz y Bunny Tsukino,
Abrazados en un cromo y con mucho mimo
Dos patatas zombificadas reposando y bebiendo vino
Pasar la noche que pasamos ayer, era nuestro destino.
Canta sobre la habitación con melodías personajas.
Esa palabra fue la primera de nuestra historia maja.
Se marcha a cocinar pescados que servirá en rodajas.